Fundacion luis muñoz marin: FLMM PDI – Fundación Luis Muñoz Marín & Parque Doña Inés – Conoce las especies de Puerto Rico

Posted by alexxlab
February 22, 2023
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Fundacion luis muñoz marin: FLMM PDI – Fundación Luis Muñoz Marín & Parque Doña Inés

FLMM PDI – Fundación Luis Muñoz Marín & Parque Doña Inés

Acerca de la Fundación

Luis Muñoz Marín

La Fundación Luis Muñoz Marín (FLMM) se encuentra localizada en San Juan, Puerto Rico. Creada en 1980 como una organización sin fines de lucro (501c3)
de carácter educativo y cultural tiene como misión ayudar a construir el provenir de Puerto Rico, preservando, actualizando y difundiendo los valores, filosofía y pensamiento de Luis Muñoz Marín y promoviendo su aplicación a la identificación y solución de los problemas principales del país. En líneas generales, la FLMM promueve el estudio de la historia contemporánea de Puerto Rico, la discusión de temas de actualidad que sean de interés público, la conservación del medio ambiente y los recursos naturales en Puerto Rico y el Caribe y cualquier manifestación cultural que propicie el gusto por las bellas artes.

Inspirada por la revolución democrática pacífica y dramática que transformó a Puerto Rico, la Fundación continúa desarrollando sus terrenos como un lugar de importancia histórico-nacional. Desde la apertura de la propiedad al público, la instalación ha educado a decenas de miles de visitantes del museo, y dio la bienvenida a los investigadores que utilizan las colecciones de archivo y centro de investigación botánica.

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Colecciones históricas
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Voluntarios
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Estudiantes práctica

La Fundación Luis Muñoz Marín (FLMM) es una institución sin fines de lucro incorporada en 1980. En líneas generales, la Fundación promueve el estudio de la historia contemporánea de Puerto Rico, la discusión de temas de actualidad que sean de interés público, la conservación del medio ambiente y los recursos naturales en Puerto Rico y el Caribe y cualquier manifestación cultural que propicie el gusto por las bellas artes. Nuestra misión se centra en ayudar a construir el porvenir de Puerto Rico, preservando, actualizando y difundiendo los valores, filosofía y pensamiento de Luis Muñoz Marín y promoviendo su aplicación a la identificación y solución de los problemas principales del país.

Descripción enviada por el equipo del proyecto. La Fundación Luis Muñoz Marín es una institución sin fines de lucro que se encarga de conservar y promover el legado intelectual de la figura de quien fuera el primer gobernador electo puertorriqueño y de su esposa Doña Inés Mendoza. La fundación se ubica en la finca donde vivió la pareja por varias décadas y que fue su refugio rural ante la creciente metrópoli sanjuanera.

Gracias al esfuerzo de la fundación de conservar los predios de la finca, el lugar conserva hoy gran parte del ambiente natural original que tenía en su época. Hasta la fecha, el programa que alberga la fundación se ha acomodado principalmente en las estructuras existentes y en el edificio del archivo documental que se construyó en la década de los ’80. Sin embargo, este carece de un lugar adecuado de encuentro para los visitantes y para resguardar las colecciones de los bienes físicos de la pareja.

Así surge el proyecto para el Nuevo Centro de Visitantes de la Fundación Luis Muñoz Marín y Centro Educativo Parque Doña Inés, como una necesidad para combinar los intereses de la fundación y el parque, y para acoger a los visitantes. El programa del nuevo edificio es principalmente el área de exhibición o museo, almacenes para poder las colecciones de la fundación y del parque, oficinas administrativas, laboratorio, biblioteca y un salón multiuso.

El principal reto del proyecto fue el emplazamiento y su escala. La huella del proyecto sobrepasa considerablemente los edificios existentes, y una de las consideraciones principales era no alterar la esencia de la finca como espacio verde. Por otro lado, el proyecto tenía vincular la Fundación y el Parque Doña Inés ubicado en el límite norte de la propiedad. Por último, la arquitectura tenía que adaptarse a un territorio irregular y boscoso. El proyecto se ubica en el límite norte de la finca en colindancia con la vía principal de acceso. Para la época en que vivía la pareja Muñoz Mendoza en ese borde había cientos de espigas de bambú, que más tarde fueron removidas por considerarse una plaga dejando el claro que tenemos hoy.

El proyecto redefine ese límite y crea el umbral para la entrada a la Fundación. Entre el volumen principal y el salón multiuso se crea un vestíbulo exterior cubierto por una pérgola de aluminio perforado de tonos verdes. El visitante puede tanto entrar directamente al edificio en la planta principal, participar de una actividad en el salón multiusos o dirigirse hacia la plazoleta para ir todas las áreas de la fundación. La plazoleta también incorpora el despacho y biblioteca de Don Luis Muñoz Marín a la secuencia de piezas a ser exhibidas.

Una vez dentro del edificio, el visitante se desplaza a través de una leve rampa hacia el área de exhibición, donde lo recibe el espacio de proyección y luego el área de exhibición. Al finalizar el recorrido el visitante se ubica en torno a la plazoleta y el resto de la fundación. Volumétricamente, el edificio se conforma de volúmenes sólidos de hormigón expuesto y combina el acabado liso con una textura ornamental que evoca el entramado de bambú que existió en el lugar.

Thanks to the foundation’s efforts to preserve the existing area, the place remains a natural environment and retains its original atmosphere. Until now, the places needed for the foundations were located in existing buildings and in the Archive building built in the 80s, but it did not have a suitable place for visitors to meet and to house the collections of Luis Muñoz Marín and Inés Mendoza.

The main problem for the project was its location and scale. The area of the new building far exceeds the area of any other existing building. One of the main problems that had to be solved was not to affect the feel of the place. On the other hand, the project was supposed to physically secure the connection between the Foundation and the park, located on its northern edge. The building could not be placed anywhere else, and its form must be combined with the irregular topography, wooded and historically gentle landscape. The project is located on a cleared strip of land at the northern boundary of the site, next to the Dona Ines Park. At the time the couple lived there, the site was thickly planted with bamboo, which was placed to secure the complex and define the boundaries of the property, they were later removed as bamboo is considered a plague, and left the empty space as we know it. today. nine0003

The project overrides this limit, but basically creates a threshold for new entry into the Foundation. The junction of the main building and the mixed-use space forms an outdoor lobby covered by a perforated aluminum canopy that identifies the entrance to the inner plaza and the rest of the grounds. The visitor can enter directly into the exhibition area on the ground floor, walk into the multi-purpose hall, or walk into the square, which forms a small public space that is a turning point for the rest of the main buildings. The square also serves as a link for another project strategy: integrating the existing LMM library/office into the main exhibition sequence. Once inside the main building, the visitor walks along the light ramp from the lobby towards the exhibition area, then enters the projection room, and then into the main exhibition. nine0003

At the end of the sequence, the visitor visually returns to the exterior, where the new building includes the LMM library/office, and resets the view to the square and the rest of the foundation. Access to the first floor, where the administration and collections are located, can be reached via an external staircase descending along the northern façade, or via an internal staircase separating the lobby from the exhibition area. The tectonics of the building are formed by solid volumes of exposed concrete, combining a smooth finish and a texture reminiscent of the bamboo spikes that existed here. nine0003

The economy of Trujillo Alto is mainly dependent on agriculture. The main products of cultivation are sugar cane, coffee, and tobacco. The residents are also engaged in cattle breeding. In recent years, trade and industry have become an integral part of the city’s economy. Trujillo Alto has several factories for the production of food, wood, metal, electrical equipment. There are also quarries for the production of building materials in the city.
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The population is
(Source: U.S. Decennial Census ^[5]
1899 (1900) ^[6] 1910-1930 ^[7]
1930-1950 ^[8] 1960-2000 ^{^{^{^[9] 2010 ^[10] )}}}
1900	1910	1920	1930	1940	1950	1960	1970	1980	200128 9012U
5683	6345	7570	9576	11726	13605	18251	30669	51389	61120	75728	74842

In the past, communication with the city was limited due to its location on the other side of the Rio Grande de Lois. The construction of two bridges in 1826 made it easier to travel to the city. In 1939, the United States Army built a steel bridge at the entrance to the city on PR-181 to replace one of the old ones. Although the bridge is no longer in use, it has become a symbol of the city and is still standing today.
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